Ritos en Medicina Tradicional Descripción y Comentarios

pie_minimo.jpgEl curandero, el partero, o cualquier persona de la comunidad, que practica la medicina tradicional, siempre usa en sus intervenciones, los rituales que se han mantenido vigentes y trasmitidos a través de las generaciones, los que influyen positiva o negativamente en la psicología del enfermo al cual se trata de curar. Por ejemplo, el mirar la coca para descubrir el origen de las enfermedades y, su tratamiento, averiguar las pérdidas de dinero o de animales, es común en estas culturas quechuas.

También se practican otros ritos para llamar el ánimo de los asustados, para curar la mara,la japh’egka, el pujyu o manantial, la waira, las maldiciones, etc. No se puede hablar de Medicina Tradicional, tomando en cuenta solamente el tratamiento físico de las enfermedades. La medicina tradicional, está referida profundamente al tratamiento psicosomático, donde imprescindiblemente y además del uso de elementos como las plantas medicinales, partes de animales y algunos minerales,entran los ritos.

En cada comunidad y a nivel doméstico, las familias, especialmente las mujeres, tienen conocimiento del uso de algunas plantas medicinales, que las utilizan cuando algún miembro de su familia se enferma, acompañando siempre estos tratamientos con ritos de santiguar sobre las medicinas preparadas. Estas prácticas difieren de un hogar a otro, en el uso de diferentes plantas medicinales para un mismo tratamiento.

Hasta hace poco tiempo atrás, era habitual que el médico tradicional sea criticado por su trabajo en la comunidad y denunciado por la práctica arbitraria de la medicina, por parte de los médicos académicos y, por eso la misma comunidad los protegía no divulgando sus nombres cuando eran interrogados, sobre quien era el curandero. Muchas veces se han visto que se les han aplicado multas y amenazas de parte de sistema oficial de salud. Estas acciones determinaron que ellos vayan desapareciendo. La historia de sus habilidades y de sus conocimientos ancestrales se fue perdiendo según pasaba el tiempo.

PRODECO, con la ayuda de Diálogos de Dinamarca, con el concurso de los curanderos de las comunidades, ha estado trabajando en la recuperación, en la sistematización y en la difusión de estos conocimientos, transmitiéndolos a los futuros nuevos médicos tradicionales comunitarios que, se han estado capacitando en los municipios de Chuquisaca Centro y Norte del Departamento, los mismos que actualmente están vigentes. Para conseguir este objetivo, hemos tenido que captar la confianza de los viejitos que practican la medicina tradicional. Todos ellos mantenían en secreto sus conocimientos, pero además, en estos secretos bien guardados radicaba la eficacia del tratamiento.

Actualmente estamos trabajando en la implementación del sistema único de salud intercultural, que es el nuevo modelo nacional. Estamos palpando finalmente lo que durante años hemos estado tratando de conseguir y es la construcción de un puente de entendimiento entre ambos sistemas de salud para mejorar la situación sanitaria de los habitantes de las comunidades, para aplicar y desarrollar programas de salud con un fuerte enfoque intercultural, respetando y fortaleciendo la Medicina Tradicional. Esto quiere decir que ambas medicinas deben funcionar en forma coordinada,espetándose el uno al otro. No se pretende que ambos sistemas el tradicional y el biomédico, trabajen en un mismo centro hospitalario, eso sería injusto y crearía un desequilibrio entre ambos. Sugerimos que cada uno de ellos se desarrolle en sus propios ambientes. La gran fuerza de la medicina tradicional es la aplicación de diferentes medicamentos que son preparados in situ, por el mismo curandero y, acompañados de rituales,que influyen positivamente sobre la psicología de los pacientes, los que a través de su cultura sienten las fuerzas curativas de estas acciones, que son la fuente de su fe.

La medicina académica debe seguir tratando a los pacientes como lo está haciendo hasta ahora, y debe coordinar sus acciones con la medicina tradicional, si el paciente lo pide.

Comparando con las diferentes especialidades de la medicina biomédica, podríamos decir que:cardiología,traumatología,pediatría, etc. Son especialidades que según las patologías del paciente son derivados al especialista quien asume la responsabilidad del tratamiento. Así también debe funcionar la medicina tradicional frente a la medicina académica, solamente que en este caso es el paciente que es dueño de su salud quien pida ser tratado al mismo tiempo por el curandero de su comunidad y viceversa. Y es importante que para conseguir este apoyo del curandero en bien de los enfermos, el personal de salud del sistema oficial deba tener conocimiento de estas prácticas y las respete. Esto quiere decir que la medicina tradicional deberá ser aplicada, al mismo tiempo del tratamiento médico convencional, si el caso lo amerita.

“Un ejemplo de este comportamiento se presentó cuando una niña de Sopachuy, estaba en tratamiento por una osteomielitis en la tibia de la pierna derecha, internada en el hospital Santa Bárbara. Los padres de la niña vinieron a nuestra oficina para pedir consejo de, si fuera posible que ellos la trasladen a su comunidad para ser tratada al mismo tiempo por sus curanderos. Conociendo la enfermedad y como médico académico, que trabajé con ellos durante años, comprendí que no estaban satisfechos con el tratamiento del médico académico del hospital, y querían el apoyo de su curandero, profundamente enraizado en su cultura. Les aconsejé que hablaran con el médico que la estaba tratando, para pedir permiso de unos cinco días, para trasladarla hasta Sopachuy; el médico accedió al pedido, con el compromiso de que, mientras ella esté allá,debería seguir con el tratamiento prescrito,en el hospital de esa población.

Luego debían devolverla al hospital Santa Bárbara, una vez realizado el tratamiento por parte del curandero. Así se hizo y cuando regresaron estaban muy contentos por haber cumplido lo que su cultura les exigía. Ella siguió con el tratamiento médico convencional, pero la familia con la conciencia tranquila, de haber acudido a sus curanderos.

Los profesionales de los servicios de salud, no deben despreciar a la Medicina Tradicional, sino dejar que ésta mantenga su propia identidad y su propia virtud cultural y, más bien, coordinar y actuar en forma conjunta para mejorar la oferta de servicios a las poblaciones rurales y ganar de esa forma la confianza de los pacientes.

Bajo estas reflexiones, sentimos la necesidad de ver a ambas culturas con los mismos derechos y con las mismas responsabilidades en la solución de la problemática de la salud y de la enfermedad, haciendo que cada quien aporte con sus conocimientos y con su experiencia. Para ello lo que se debe garantizar es lo que nuestro proyecto propone y es de que la práctica de los procedimientos sea segura, ética y culturalmente aceptables.

Para conseguir este objetivo, los recursos humanos tradicionales de salud en las comunidades deben capacitarse o, mejor deben fortalecer y reciclar sus conocimientos, bajo reglas universales del ejercicio de prevenir y curar las enfermedades, sin apartarse de sus costumbres ni de su cultura, y que están enmarcados en los más elementales principios de higiene y de mejorar las prácticas que actualmente están en uso en las comunidades rurales.

Dr. Miguel Isola Delgadillo