El agua, un bien de todos

El cuerpo humano está formado por agua en algo más del 70 por ciento y si constantemente no reponemos la cantidad que perdemos a través de la orina y el sudor, en cuestión de días moriríamos. Por ello el agua dulce es un recurso vital, pues su necesidad es tan urgente que se antepone incluso a los alimentos.

De ahí que existan corrientes en favor de que el acceso a ese líquido sea considerado a nivel internacional entre los derechos humanos fundamentales.

Del otro lado del espectro político, a medida que crece la población mundial y el cambio climático disminuye las fuentes de agua dulce, se reclama el control del agua y su distribución a través de la privatización.

El agua ha sido calificada como el oro azul, una manera de subrayar su valor e importancia económica al compararla con el petróleo, llamado corrientemente oro negro. Cualquiera diría que todavía no hay que preocuparse tanto por ella, ya que cubre las tres cuartas partes de la superficie del planeta, pero no debemos olvidar que en su mayor proporción es salada, alrededor del 97 por ciento.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de un millón y medio de niños mueren cada año de enfermedades diarreicas o de otra índole por ingerir agua contaminada.

Según la misma fuente, mil 100 millones de personas en el mundo no tienen acceso al agua potable y otros dos mil 600 millones, de un total de siete mil millones, no cuentan con suficiente agua para la higiene y sanidad.

ARGENPRESS.info

El Diario – revistas y suplementos

Por: Julio Hernández – La Prensa – 24/04/2012